Hoy me di cuenta de algo muy importante para el recorrer del camino.
Tengo años pensando y leyendo sobre la búsqueda espiritual, sobre cómo hacer para conectarse con ese ser que somos cada uno de nosotros. He realizado cursos de meditación, talleres de crecimiento personal, he consultado todo tipo de terapias que te ayudan a deslastraste de toda la carga que uno va recogiendo en el camino. Todas estas cosas me han enseñado mucho. Me han mostrado los diferentes caminos que hay. He encontrado verdades que han hecho sintonía conmigo y otras que no tanto.
Sin embargo hoy entendí algo clave. La búsqueda espiritual no es una búsqueda intelectual. Puede parecer obvio pero para mi no le era. En el fondo sabía que era así, pero la mente no me permitía procesarlo. Pasamos la vida pensando cual es la religión, culto, dogma o camino espiritual que mas se parece a nosotros y no nos damos cuenta que la respuesta la tenemos en nuestras narices. ¡No tenemos que pensar!.
No tenemos que pensar. Tenemos que hacer nuestra mente a un lado. Tenemos que pedirle permiso y decirle que se calle un momento para que nos encontremos con nuestro verdadero ser. Nuestro verdadero ser que es tu alma y tu espíritu y es quien tiene todas las respuestas. Que no vive atado al tiempo (no lo conoce). Que eres tu. Es tu verdadero ser, sin ilusiones y sin posesiones.
Tenemos que vivir en el Ahora, en el momento, porque en ese momento que paramos y observamos sin juicio y apartando la mente vamos a conseguir contactarnos y darnos cuenta quienes somos. Vamos a descubrir el misterio de la vida. Vamos a contactar con Dios. Y eso no lo permite la mente. La mente es nuestra herramienta para pensar. Pero no más que eso. La mente nos da respuestas a raíz de información que le vamos metiendo y que va absorbiendo en el transcurso de la vida. Pero la mente que es la constructora del ego nos crea la fantasía de lo que quisiéramos ser, y basa sus necesidades en lo externo. En la ilusión de lo que creemos que es la vida, en las posesiones materiales, deseos, en proyecciones, en el pasado y el futuro y no permite que el Ser vea el ahora porque le tiene miedo.
El miedo que es el ego temiendo morir. Temiendo desaparecer, temiendo ser aniquilado. “Para el ego la muerte siempre esta a la vuelta de la esquina” como dice Eckhart Tolle en su libro “El Poder del Ahora”. El miedo que se manifiesta de diferentes formas: fobias, ansiedad, temores, angustias, entre otras, creyendo que algo siempre va a pasar y ese algo es la muerte del ego.
Y cuando digo que no hay que pensar me refiero a hay que decirle al ego, que además quien va a dar la instrucción es la mente: ¡que se calle!. Pero cuando confrontes a la mente y al ego se va ha producir un quiebre interno de dudas y miedos, de confrontación porque la mente es poderosa y no quiere ser desplazada. Entonces cuando tu Ser se manifieste será el momento que conectarás con el “Ahora”.
Cuando le digamos al ego que nosotros no somos nuestro trabajo, no somos nuestro nivel social, nuestra educación, nuestro pasado, nuestra apariencia física, ideas políticas, el dinero, etc., entonces el ego va a gritar y se va a sentir en el alerta de la muerte. Y cito a Tolle “ La muerte es desnudarse de todo lo que no es usted. El secreto de la vida es “morir antes de morir” y descubrir que no hay muerte”
Gracias a Eckhart Tolle por el libro El Poder de Ahora. Fuente de inspiración para este artículo
